Quizás el bando A no merecía ese nombre, pero de forma esporádica lo pide, y con muchas ganas.
En cuanto al bando B, pues bueno... por una parte me parece merecido. Se necesitan golpes para madurar, y a este sujeto, a día de hoy, le van a hacer falta muchas...muchísimas...Pero por otra parte me da algo de pena...igual él no es el culpable, si no de la educación y (por decirlo de algún modo) la salud mental de sus educadores.
De todos modos, abandono en poco más de un mes esa batalla abierta... me pregunto cómo reaccionará el bando perdedor... de hecho me muero de ganas de saberlo, je....
Aparte de eso, el parásito ha encontrado un nuevo objetivo y ya ha empezado a sacar sangre. Además, me enteré de que hizo sufrir a una de las pocas personas a las que osé confiarle todo aquel ''vómito''.
Así, esto demuestra claramente que todos los parásitos provienen de lo mismo...y mientras tanto, este gran g* seguirá buscando aquel precioso unicornio del que hablan las leyendas......
No hay comentarios:
Publicar un comentario